Simplemente quería compartir esta nota publicada en el diario “El Cordillerano”. Nuevamente, muchas gracias a Adrián Moyano.
El Trío Burgol volvió a escena y quiere más
ALIMENTO PARA EL ALMA MUSICAL
La formación que alinea a Bellora, Mastrolía y Carrasco tocó el último fin de semana después de un impasse que sin embargo, fue muy productivo para su sonido. Aspiran a visitar el estudio de grabación dentro de poco.
Después de la finalización de un ciclo que debe tener pocos precedentes en el medio musical barilochense, el Trío Burgol volvió a escena el último fin de semana. El grupo que se conforma con Pedro Bellora (guitarra), Máximo Mastrolía (batería), Raúl Carrasco (bajo) tiene la intención de recuperar asiduidad en sus presentaciones y además, apunta a grabar un CD en el cual se pueda plasmar la calentura del vivo. Horas antes del concierto en La Barraca, llevó la voz cantante en el diálogo el gran Bellora. “El trío está muy bien, después de esta etapa post Plaza Patagonia, donde tocamos todas las semanas durante seis o siete meses. Estuvimos tocando, quizás un poco menos, pero también aprovechando esta suerte de impasse para ajustar cosas que eran necesarias y que a veces, en el fragor de la lucha no se pueden. Así que contentos, con un trío más ajustado que nunca y con muchas ganas de tocar”.
Quizá sea pertinente repasar conceptos. “El Trío Burgol es un grupo de la temática del jazz, basado en lo que nosotros llamamos el jazz popular, para la oreja de la dama y el oído del caballero, es decir, el jazz que va desde las viejas y conocidas canciones, pasando por el blues y hasta llegar al jazz rock y el sonido más moderno de la fusión. Se conforma con tres fanáticos de la música, el señor Maxi Mastrolía, el señor Raúl Carrasco y yo, que estoy tocando la guitarra. Como grupo, estamos tocando hace un buen rato y la verdad, muy contentos de estar haciendo la música que nos gusta y del modo que nos gusta. Eso siempre es una gran alegría”, subrayó el de la viola.
Le propusimos a Bellora que hiciera un ejercicio y proyectara los próximos meses del Burgol. “Los imagino pasándola muy bien tocando. Para nosotros ya es una fiesta, ya sea un ensayo o tocar en público. O grabar algo, adonde estaremos yendo en breve, para tener un pequeño disco, más que nada para poder compartir y poder distribuir, supongo que en una forma bastante alternativa. Esos son los planes, pero realmente, ya estar tocando es la recompensa”.
Bienvenido el funk
En el nuevo ciclo que arrancó el último viernes a la medianoche, el Burgol planea introducir algunas modificaciones, según explicó el guitarrista unas horas antes del show. “Vamos a estar haciendo algo que es la primera vez que lo hacemos y queremos ver cómo funciona: vamos a hacer dos entradas. Una primera entrada más orientada a estas canciones del jazz clásico y una segunda entrada claramente dedicada al funk, al blues y el jazz rock, así que va a haber esta pequeña división de dos entradas cortas pero bien dedicada a estas sonoridades distintas, que de alguna manera son los dos sombreros que se pone el trío, a la hora de tocar”.
En materia de compositores a visitar, “de las canciones del jazz viejo, como bien sabés son todos autores desconocidos que tenían más que ver con las canciones de la comedia musical y de películas, del ‘30 al ‘50. Y con el jazz moderno, los más conocidos como autores son John Scoffield, Mike Stern y ese tipo de sonido”, señaló Bellora, por las dudas que algún melómano de Bariloche todavía no se haya cruzado con sus pasos.
En relación con los planes de grabación, “probablemente estemos entrando en pocas semanas al estudio y realmente no creo que sea demasiado, porque las grabaciones de jazz son bastante express. Realmente es una música que sucede en vivo, así que el estudio no es mucho más que la oreja de un espectador con buena memoria. Simplemente, es sacar una foto de algo que ocurra, por eso no creo que esa grabación lleve demasiado tiempo, tenemos ganas” enfatizó.
Ahora bien, ¿la del último viernes fue una presentación puntual o la iniciación de un ciclo? “Lo primero es concreto y lo segundo, es a lo que aspiramos. Apuntamos a con suerte, a tener continuidad. Pero particularmente, este lugar parece ser muy interesante, una opción nueva para nosotros. Así que aspiramos a hacer algún tipo de ciclo, a mí particularmente me gusta mucho que tenga algún tipo de continuidad como para poder decir: OK no pudiste venir esta vez, pero en equis tiempo vas a tener otra. Así que ojalá que así sea”. Que los duendes de la música sean propicios al Burgol.